El alcalde de Baños, José Luis Freire, anunció este viernes, que la ciudad ha vuelvo a la normalidad tras enfrentar los riesgos posteriores a la erupción del volcán Tungurahua.
“Tuvimos una semana en la que nuestro vecino, el volcán Tungurahua, amaneció un poco mal humorado, pero no deja de ser para nosotros algo que se ha convertido en una normalidad desde hace 12 años”, comentó Freire en entrevista con CRE Satelital.
Esto, luego de indicar que aunque el lunes pasado hubo la presencia de ceniza, la ciudadanía no se alarmó y actuó como correspondía.
“Hubo caída de ceniza pero - tal como indican los manuales- la gente salió a limpiar las calles y ahora están completamente limpias (…), y es que estos 12 años han sido de aprendizaje”, manifestó.
Según Freire, lo que les ha permitido enfrentar este problema, es que una de sus fortalezas es tener cerca de ellos a los científicos del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, y al observatorio del volcán Tungurahua.
Adicionalmente, comentó que la comunidad también trabaja en fuentes de comunicación inmediata, que permiten estar pendientes de lo que está sucediendo en el volcán a cada instante.
“Tenemos una red muy grande de gente que está en la montaña, y que cada vez que el volcán emite un sonido extraño o fuera de lo normal, esta gente informa de inmediato por radio a las autoridades o a los medios de comunicación”, señaló.
De acuerdo con Freire, hace dos años, la Municipalidad viene realizando un plan de contingencia junto con la ciudadanía, que se basa fundamentalmente en la prevención y educación de los habitantes.
“Nuestra ciudad cuenta tiene 17 sirenas y refugios temporales, nuestros adultos y jóvenes saben lo que tienen que hacer al ver escuchar la sirena, además, hemos ejercido simulacros periódicos que lejos de alarmar a la gente, lo q nos permite es evaluar la reacción de las personas”, finalizó.
EA2CPG
“Tuvimos una semana en la que nuestro vecino, el volcán Tungurahua, amaneció un poco mal humorado, pero no deja de ser para nosotros algo que se ha convertido en una normalidad desde hace 12 años”, comentó Freire en entrevista con CRE Satelital.
Esto, luego de indicar que aunque el lunes pasado hubo la presencia de ceniza, la ciudadanía no se alarmó y actuó como correspondía.
“Hubo caída de ceniza pero - tal como indican los manuales- la gente salió a limpiar las calles y ahora están completamente limpias (…), y es que estos 12 años han sido de aprendizaje”, manifestó.
Según Freire, lo que les ha permitido enfrentar este problema, es que una de sus fortalezas es tener cerca de ellos a los científicos del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, y al observatorio del volcán Tungurahua.
Adicionalmente, comentó que la comunidad también trabaja en fuentes de comunicación inmediata, que permiten estar pendientes de lo que está sucediendo en el volcán a cada instante.
“Tenemos una red muy grande de gente que está en la montaña, y que cada vez que el volcán emite un sonido extraño o fuera de lo normal, esta gente informa de inmediato por radio a las autoridades o a los medios de comunicación”, señaló.
De acuerdo con Freire, hace dos años, la Municipalidad viene realizando un plan de contingencia junto con la ciudadanía, que se basa fundamentalmente en la prevención y educación de los habitantes.
“Nuestra ciudad cuenta tiene 17 sirenas y refugios temporales, nuestros adultos y jóvenes saben lo que tienen que hacer al ver escuchar la sirena, además, hemos ejercido simulacros periódicos que lejos de alarmar a la gente, lo q nos permite es evaluar la reacción de las personas”, finalizó.
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